
A mí me pareció una idea magnífica y excitante. Lo cierto es que creí que iba a ocurrir en mi cumpleaños de 16. Había un chico del que yo se encontraba totalmente enamorada.
Todavía el día de hoy lo recuerdo como el primer día, esos nervios… Va a haber que cuidar que la intensidad sea recíproca. Esto impulsa las neuronas espéculo en el cerebro y contribuye a las parejas más cohibidas. Se llamaba Matías, le decían Pepe, tenía los cachetes similares a los de un sapo, los ojos verdes como dos olivas y los labios partidos por el viento del sur.
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Había un chico que me gustaba y por una vez en la vida sentí que era amor correspondido. Y como éramos muy amigos creí que algún momento eso iba a ocurrir. Yo estaba segura de que él sería la primera persona que me diera un beso.
Tiene su carácter pero es muy disciplinado», concluye Escarlata. A conocer qué viento puede llevarse este amor…
Incluye contenidos de la empresa citada, del medio Períodico El día de hoy de Extremadura, y, en su caso, de otras compañías del grupo de la empresa o de terceros. Con sinceridad, aquello me sentó mortal. No le dije nada a XXX, pero me parecía muy injusta aquella inculpación. Siempre y en todo momento me sentí muy orgulloso de mi familia, de ámbas; tanto de Los Pollos como de mis estimados Chiriviques.
El Primer Beso
Ahora espero poder localizar a otra persona donde sus besos me sepan igual o mejor que los primeros. Si bien en esto del amor, no hay reglas universales. Enviar comentarioHe leído y acepto la política de privacidadRed Backlink To Media junta los datos personales solo para empleo de adentro.
Pepe me persiguió desde quinto nivel. Copyright Ediciones Digitales SLU, Diario El día de hoy de Extremadura, 2008.
Recuerdo que era a fines de Octubre del 69 y fijamos la cita para un jueves a las 20.00h. En el Arco de la Estrella, no muy lejos de la casa de su tía. Luis me dejaba en la calle San Pedro de Alcántara, algo distanciado del sitio de la cita, sin embargo la distancia no era un inconveniente. Podía llevar a cabo ese paseo en poco más de cinco minutos corriendo.
Una Adolescencia Tortuosa: Nuestro Primer Beso
Esa tarde regresé a casa con la idea de seguir buscando mucho más besos, otros y no darme por vencida, solo debía practicar. Por momentos me sentaba sobre mi cama, aproximaba el antebrazo a mi boca y escuchaba los sonidos más o menos suaves que originariamente me había soñado como especiales. Síiiiiiiiii a veces con quien menos esperas.
Mi primer beso fué en una acampada y muy borraxa, fué con la persona que mucho más he querido en mi vida. Pero hace casi 3 años me engaño y les juro que se volvieron los besos mucho más amargos de mi vida.
A los pocos minutos la vi aparecer con los brazos en alto cubriendo la cabeza con su chubasquero verde. Traía su vaquero acampanado chorreando agua. Aquel pantalón de talle prominente, a la tendencia de entonces, marcaba la perfección de sus caderas. Una rebequita corta hasta la cintura con botones pequeños y muy juntos.
Fuimos caminando por el paseo marítimo hasta que llegamos a un jardín que hay justo frente al Muncyt. Se nos logró tarde y allí estuvimos hasta las tres de la madrugada y nos dimos el primer beso».